Un Anolis y una entomóloga

Siempre me ha encantado la forma en que estos pequeñas reptiles, llamados en algunas partes de El Salvador Bebeleches (género Anolis), extienden una proyección en su garganta (llamada barba gular). No siempre la enseñan, pero si uno espera pacientemente, tal vez uno la extienda por curiosidad (o quizá, a veces, con tono amenazante).

Anolis wellbornae, Finca El Espino, 22abr2023. Foto: Guillermo Funes

Esperé cerca de 10 minutos en medio de un cafetal en la finca El Espino y el Bebeleche de la foto me concedió el privilegio, mostrándome su espectacular barba gular anaranjada con un punto azul en medio. Hay 5 especies de Bebeleches en El Salvador y cada uno la tiene un poco diferente: uno tiene la barba gular anaranjada, otro colo rojo-naranja con puntos blancos, etc. El color o patrón de esta barba gular es clave para saber de que especie se trata: la barba gular naranja con el punto azul reveló que se trataba de un Anolis wellbornae. Pero, ¿de dónde viene palabra wellbornae?

Este Bebeleche no siempre se llamó así. En libros viejos y en la única guía para anfibios y reptiles que existe para El Salvador ("The Amphibians and Reptiles of El Salvador"), este Anolis aparece como Anolis sericeus. Allá por 1940 fue descrito para la ciencia con el nombre de Anolis ustus wellbornae, pero, muchos años después, un estudio posterior confirmó que merecía llamarse Anolis wellbornae; la palabra wellbornae hace referencia a la Dra. Wellborn. Vera Wellborn, fue una entomóloga que trabaja para la Asociación Cafetalera de El Salvador, allá por 1930. Estudiaba las diferentes plagas del café pero, aparentemente, también colectaba reptiles, lo cuales mandaba a Alemania. Hoy en día, este bonito reptil es común en cafetales y probablemente también lo fue hace 100 años cuando Vera quizá lo encontró estudiando alguna plaga del café en El Salvador (actualmente también se puede encontrar en jardines de casas en plena ciudad).

p.d: un nombre científico que termine en ae como graciae, rathbunae, hollisae, etc. usualmente hace referencia a un epónimo femenino, es decir que es una especie nombrada en honor a una mujer. Hay excepciones, por ejemplo, el nombre científico del bálsamo es Myroxylon balsamum, pero nuestro bálsamo es una variedad llamada pereirae. Acá, pereirae no hace referencia a una mujer sino a Jonathan Pereira, un un médico y químico farmacéutico inglés que estudio la extracción del bálsamo en El Salvador.